Aún no marchita

Una vez alguien me habló de la confianza hacia las rosas, en ese mismo momento me advirtieron de su belleza que puede herir, de pronto sin querer pero terminan por lastimar, entonces pensé que no podría hacer daño algo tan perfecto, tan hermoso, tan sutil como una rosa, debió ser por mi falta de visión, por la perspectiva que tenía, estaba viendo solo sus pétalos y a cualquiera esos hermosos y puros pétalos impresiona, a cualquiera enamora, pero ¿qué hay de las espinas, cómo no las vi desde un principio? parecían estar demasiado evidentes para todos excepto para mi, vaya que me deslumbró tanta belleza, de una manera tan grande que no me dejó ver más que eso, aún creo estar confundida, aún creo ver solo belleza, y por ahora, me conformo con esa ultima rosa que quedó en mis manos, que se está marchitando pero realmente aún tiene mucha vida.



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